La fachada de la Universidad de Salamanca no es solo una estructura arquitectónica; es un emblema del Renacimiento en España y una obra maestra del estilo plateresco, que se caracteriza por su ornamentación detallada que asemeja al trabajo del platero. Esta fachada es un testimonio vivo de la habilidad artística y la visión estética de la época.
La fachada fue diseñada en el siglo XVI, y su construcción se atribuye principalmente a los arquitectos Juan de Álava y Rodrigo Gil de Hontañón. Se destaca por su intrincado trabajo en piedra, que incluye elementos decorativos como medallones, escudos, figuras mitológicas, y motivos florales y vegetales, todos meticulosamente tallados en la arenisca.
El elemento más icónico de la fachada es la famosa rana sobre un cráneo, que según la tradición local, debe ser encontrada por los estudiantes si desean graduarse. Más allá de ser una simple búsqueda, este símbolo representa la búsqueda del conocimiento y la permanente vigilancia sobre los vicios y la muerte.